Sufrir un desgarro muscular es una sensación que no se olvida jamás. Puede ser que usted simplemente esté practicando su deporte favorito y sienta, de repente, cómo se rompe el músculo de una pierna.
Los deportistas, profesionales y aficionados, se exponen a sufrir lesiones en el aparato músculo-esquelético, algunas son accidentales y, consecuentemente inevitables, otras que son consecuencia de malas prácticas o sobreuso.
Si usted es un amante del tenis y sueña con convertirse en el próximo Roger Federer o la siguiente Serena Williams, sin duda necesitará de la mejor condición física posible, de una extraordinaria disciplina y muchas horas de entrenamiento que podrían desencadenar una lesión deportiva.